Los casi 400 deportados cada semana de Estados Unidos que arriban al país encuentran el respaldo de las autoridades de la Ciudad de México y federales, que les brindan apoyo para regularizar su situación migratoria, un albergue temporal o, bien, el traslado al destino nacional que ellos elijan.
El director de Atención a Migrantes, Huéspedes y sus Familias de la Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades, Rubén Fuentes, indicó que la instrucción del jefe de Gobierno es atender a la población migrante que retorna, transita o decide quedarse a vivir en la Ciudad de México, a fin de garantizar sus derechos humanos y otorgarles un trato con igualdad.